Como una especie de minga solidaria con las necesidades de la naturaleza en el cantón Quilanga, decenas de voluntarios se reunieron durante el reciente fin de semana en la parroquia san Antonio de Las Aradas para colaborar en la reforestación de una de las zonas mayormente devastadas por los incendios forestales que consumieron cerca de 10 mil hectáreas de bosques y vegetación nativa, así como, también, comprometieron gravemente la infraestructura urbana y productiva de la zona.
Los voluntarios, en esta ocasión, se aprestaron para aportar su grano de arena en un espacio de cinco hectáreas, en la reserva ecológica Loma Delgada.
Los participantes en esta jornada solidaria con los intereses medioambientales y ecológicos de la zona, son representantes de colectivos pronaturaleza, autoridades y funcionarios públicos locales y comuneros que vieron comprometidos sus recursos y sus vidas durante el flagelo incendiario.