Una reciente comparecencia ante los medios locales de las autoridades competentes que investigan varios aspectos del accidente de tránsito que, el viernes 6 de diciembre, causó la muerte de unas 18 personas y dejó más de una docena de heridos en la vía que conduce a la provincia de El Oro, expuso la existencia de varias incógnitas que aún no tienen una respuesta clara.

Una de ellas es la causa del siniestro, ya que, hasta el momento, sigue siendo una hipótesis que ese hecho fue el resultado de un desperfecto mayor en la línea de frenos de la unidad de transporte de pasajeros.

Otra de las dudas comentadas por quienes llevan la investigación es que queda por definir si el conductor del bus se encuentra entre los afectados o , acaso, “se dio a la fuga”.

Se añadió que todas las víctimas mortales fueron identificadas, ya que hasta hace unos días, dos de ellas no habían sido reconocidas. Los cuerpos ya están siendo entregados a sus familias.

Hasta el martes 10 de diciembre, unas 13 personas permanecían internadas en casas de salud para la atención de sus heridas, manteniéndose algunos casos con pronóstico reservado.

Desde el punto de vista técnico y tal como anteriormente informó la representante de la ANT en Loja, la unidad de transporte siniestrada contaba con todos sus documentos en orden y el conductor profesional del bus no tenía afectaciones en los puntos de su licencia.

Por ahora, se tiene claro que el listado oficial de pasajeros incluía únicamente 10 nombres al instante de salida del bus desde Loja, aunque al momento del accidente éste se encontraba casi lleno. Esta circunstancia es la que demoró la identificación oportuna de alguna de las víctimas.