La primera barcaza de generación eléctrica flotante alquilada por nuestro gobierno a los turcos fue, por diversos factores, blanco de la atención mediática y ciudadana, incluso, desde mucho antes de su llegada al país. Menor ruido informativo tuvo el arribo de la segunda embarcación, ocurrido una semana antes de Navidad. Pero, más silenciosa todavía, aunque no desconocida por la prensa, fue la llegada del tercer barco para cumplir similares funciones.
El arribo de esta nueva unidad de generación de 100 megavatios se concretó el último fin de semana y su arriendo es por tres meses, prorrogables por otros tres si amerita el caso. El costo que deberá pagar el Estado a los arrendadores sería afín a lo pactado con la primera barcaza llegada el año pasado a nuestro país, de unos nueve centavos de dólar por kilovatio generado.
La operación formal de generación eléctrica de esta unidad iniciaría el próximo mes de febrero, luego de concluir los ajustes técnicos propios de un proceso tan complejo como éste. En conjunto, las tres embarcaciones proporcionarían unos 300 megavatios de energía eléctrica.