Amaluza es la cabecera cantonal de Espíndola, en la provincia de Loja y, presuntamente, estaría atravesando una seria crisis de movilidad por una supuesta falta de combustible en su jurisdicción.
Medios informativos lojanos aseguran, en base a testimonios ciudadanos recabados por su personal, que la única gasolinera que quedaba operativa en ese sector llevaría varios meses sin brindar su servicio, obligando a los dueños de vehículos a abastecerse de gasolina o diésel en el vecino cantón Calvas.
Según las referencias testimoniales, la empresa encargada de la venta del combustible a nivel local tendría un conflicto burocrático que no ha podido resolver hasta el momento, situación que le obliga a mantener cerradas sus instalaciones. Por tal motivo, de ser cierta esta realidad, todas las actividades productivas locales se verían afectadas por este desabastecimiento, una necesidad que, tentativamente, debe atenderse en otro cantón, derivando la situación en mayores costos operativos para los productores y comerciantes de la localidad.